Por Douglas Vaca
Periodista y Abogado
Manabí debe confiar en sus universidades. Nuestra
fortaleza, hoy y mañana, debe estar en nuestros centros de Educación Superior.
Definitivamente hemos entrado en la era del conocimiento y solamente el talento humano nos dará los frutos que pretendamos
alcanzar. El ejemplo más patético lo está dando el “Mashi Rafael”. Si él es
capaz de enfrentarse con el mundo, también nosotros podemos hacerlo. Gran
desafío para nuestra juventud… también para los adultos. La cultura es de
todos. El estudio es de todos. La lectura es de todos. “Quien no espera vencer
ya está vencido”, decía el poeta Olmedo.
Entonces,
aplausos para nuestras universidades que están buscando la excelencia. Todas
tienen igual responsabilidad con el futuro de Manabí. Las nombramos a las
cinco, en orden de fundación: UTM – ULEAM – UNESUM – ESPAM y la particular “San
Gregorio”.
De todas
podemos comentar sus logros académicos. Hoy empezamos por la Universidad Laica
Eloy Alfaro de Manabí y su rector Dr. Medardo Mora Solórzano. Indudablemente
que ese gran rector, que es Medardo, es el mayor artífice, desde el nacimiento,
hasta su presente consagratorio. Dice la comunidad, “la historia de Manta,
puede dividirse en 2 períodos: antes y después de la ULEAM”. Entre los
múltiples aciertos de esta Universidad, destacamos hoy la creación de la
Editorial “Mar abierto”, desde el mes de enero del año 2000. Libros de las más
diversas temáticas han salido de sus talleres, que son una gran contribución a
la bibliografía de Manabí y que circulan por todo el país y el exterior. Factor
fundamental en este equipo, es el escritor mantense, Ubaldo Gil Flores, que se
desempeña como director general de la Editorial. Es además, notable novelista,
de cuyas obras comentaremos posteriormente.
El año
anterior se realizó Manta, el II Seminario Internacional de Editoriales
Universitarios, lo que revela las proyecciones que está logrando esta
iniciativa manabita, única en nuestra provincia.
Merece
destacarse la publicación de la Revista – libros: Cyberalfaro, que es un texto
académico de investigación y creación y que ha llegado ya al número 25.
Antes de
morir, el gran escritor alemán W. Goethe, exclamó: “Luz, más luz”.
Parafraseando esa exclamación, podemos decir que Manabí necesita “Libros, más
libros”, para sacudir nuestra inercia, que nos mantiene como una provincia con
bajísimo índice de lectura.
Las
universidades manabitas están llenando esos vacíos, para que por fin podamos
entender que: “no solo de pan, vive o debe vivir el manabita”.
Necesitamos
prioritariamente: “Luz, más luz… libros, más libros”.
¡Ese es el
desafío para la “Quinta” Universidad, del conocimiento, hablaremos
posteriormente!
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