Por: Olga Vélez de Mendoza (coautora del libro Ciudades Preventivas)
“Y porque la guerra no esta perdida en la lucha contra el uso indebido de la drogas ilícitas y convencida que prevención es la mejor alternativa, invito a esta selecta audiencia, y toda la colectividad, especialmente a padres de familia y maestros a comprometernos para que nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos crezcan sanos y seguros con la sonrisa a flor de piel y para que nunca un niño, un joven, ni un adolescente deje ver en su rostro una mueca de dolor que lo obligue a él o su familia a buscar tratamiento y rehabilitación por drogodependencia”.
Uno de los peores males de la sociedad actual es el consumo indebido de sustancias psicoactivas, cuyos resultados son la destrucción de quien las usa, su familia y la colectividad, motivo que no podía ser ignorado por nuestra querida Universidad, que con la responsabilidad y proyección humana y académica que le compete, decide incluir en el currículo académico de la Facultad de Trabajo Social las Especialidades de Familia y Desarrollo de la Colectividad y de la Problemática de Drogodependencias y la Escuela de Psicología con Clínica Ocupacional, las mismas que forman profesionales humana, técnica y científicamente preparados para que cumplan con el encargo social, en homenaje a la familia como elemento básico de la comunidad que lucha día a día en la búsqueda de la tan esquiva felicidad.
Este compromiso para con la patria que asume la Universidad con el permanente aporte de nuestro querido Rector Dr. Medardo Mora Solórzano, nos permite abrir caminos en la búsqueda de mayores y mejores conocimientos sobre la problemática y así logramos establecer un convenio Marco con el CONSEP, con varios municipios y organismos internacionales como la RIPRED, BRAHA, Fundación América Libre de Drogas, y ser miembros de la Tash Force y de la Federación Mundial contra las Drogas con sede en Suecia, de la que nuestro Rector y un gran porcentaje de docentes de la facultad de Trabajo Social somos miembros fundadores.
Uno de los peores males de la sociedad actual es el consumo indebido de sustancias psicoactivas, cuyos resultados son la destrucción de quien las usa, su familia y la colectividad, motivo que no podía ser ignorado por nuestra querida Universidad, que con la responsabilidad y proyección humana y académica que le compete, decide incluir en el currículo académico de la Facultad de Trabajo Social las Especialidades de Familia y Desarrollo de la Colectividad y de la Problemática de Drogodependencias y la Escuela de Psicología con Clínica Ocupacional, las mismas que forman profesionales humana, técnica y científicamente preparados para que cumplan con el encargo social, en homenaje a la familia como elemento básico de la comunidad que lucha día a día en la búsqueda de la tan esquiva felicidad.
Este compromiso para con la patria que asume la Universidad con el permanente aporte de nuestro querido Rector Dr. Medardo Mora Solórzano, nos permite abrir caminos en la búsqueda de mayores y mejores conocimientos sobre la problemática y así logramos establecer un convenio Marco con el CONSEP, con varios municipios y organismos internacionales como la RIPRED, BRAHA, Fundación América Libre de Drogas, y ser miembros de la Tash Force y de la Federación Mundial contra las Drogas con sede en Suecia, de la que nuestro Rector y un gran porcentaje de docentes de la facultad de Trabajo Social somos miembros fundadores.
En América Latina 2 universidades hemos asumido el reto de formar profesionales para atacar este mal: la USAL de Buenos Aires- Argentina y la ULEAM de Manta-Manabí-Ecuador; siendo nosotros pioneros en el país los que desarrollamos la hermosa tarea de formar profesionales con un perfil especial para atender desde el área preventiva esta problemática.
En este contexto la Universidad Eloy Alfaro y su Facultad de Trabajo Social nos convertimos en Líderes para asumir el compromiso de atender los grupos más vulnerables emprendiendo una masiva capacitación y ejecución de acciones interinstitucionales en permanente coordinación con el Departamento Vinculación con la Colectividad y Organizaciones no gubernamentales.
La representación que en su nombre y el de la Universidad Ud. me concediera Sr. Rector, me permitió hacer fuera del país nuevos retos y personalidades que transitan con conocimientos, cariño, responsabilidad y mucha sensibilidad en esta tarea como Mina Seinfeld de Carakushanki nuestra común amiga coautora del libro denominado Ciudades Preventivas, el que Ud. tendrá la benevolencia de presentar, cuyo contenido es una innovación a la vida, tratando de advertir desde un punto de vista sistémico y multifocal los aspectos negativos que su incidencia conlleva en todos los estratos de la sociedad, toda vez que no es un problema individual, por lo que invocamos a todas las instituciones y ONG, particularmente a los Municipios para que como administradores de la ciudad, asuman con nuestra asesoría la Constitución de Comités Locales Municipales y establezcan las ordenanzas necesarias para lograr una ciudad libre de drogas en la que la salud y el trabajo sean denominador de una vida sana.
Amparados en la filosofía de que el problema no son las drogas ni su existencia, sino el individuo con sus necesidades insatisfechas, el libro Ciudades Preventivas tiene la garantía de ser un texto académico al haberse adaptado para su operatividad del MIR modelo de Intervención de la Realidad de Borys Lima, en todas sus fases.
En nombre de los coautores mis amigos, Beatriz Velasco y Carlos Arriaga de México, Luis Viale de Argentina, Franklin Alcaraz del Castillo de Bolivia, Mina Seinfeld de Carakushanki, de Río de Janeiro – Brasil y particularmente, de vuestra servidora que con sano orgullo es parte de esta Universidad de este texto que hoy circula en varios países del mundo, permítame Señor Rector agradecer a Ud. y a la Universidad por esta nueva oportunidad de que la Facultad de Trabajo Social transcienda en el tiempo y el espacio; al Lcdo. Ubaldo Gill, Director de la Editorial Mar Abierto y el personal de la misma, a los docentes y estudiantes de la Facultad de Trabajo Social y Psicología que con sus conocimientos y entusiasmo dan vida a las ciudades preventivas, a la Dirección Regional del CONSEP –Manabí, por su apoyo en mi gestión, los señores Alcades de los Municipios que han asumido este reto, conscientes que el hombre es el recurso más importantes con que cuenta y al que está obligado a proteger, y especial y particularmente le dedico a ellos, los anónimos, que deambulan por la calles o se esconden enLa Poza o los tugurios para autodestruirse como protesta de una sociedad indolente que los desprecia y etiqueta sin piedad .
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